El Tribunal (TDLC) aprobó la operación consultada por Telefónica Móviles S.A., de España, y BellSouth Chile, Inc. y BellSouth Chile Holdings, Inc., por estimar que ésta, a pesar de implicar una mayor concentración en un mercado con claras barreras a la entrada, no tendería a impedir, restringir o entorpecer la libre competencia, atendidas las características técnicas y económicas del mercado en que opera la telefonía móvil, las fuerzas de oferta y demanda que operan en esta industria y la influencia del vertiginoso cambio tecnológico.
Sin perjuicio de lo anterior, el Tribunal estableció una serie de condiciones que debían ser cumplidas por las empresas consultantes.

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